lunes, 29 de junio de 2015

Una de Vaqueros # 21

Una de Vaqueros. . .
Arturo García Gaytán.
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Dijeron que la India María murió, no es cierto;
cobra en la nómina del desgobierno estatal.

Menos días. Es el saludo habitual para los empleados de la administración pública estatal, pero no para todos, pues hay quienes se aferran y manejan como si fueran a permanecer royendo el hueso que los alimenta hoy día, al menos es la impresión que quieren vender.
Tal es el caso del Ratón Miguelito López Miranda, que tras de sí deja un rastro fétido y nauseabundo de corrupción e impunidad, desde que manejó dineros universitarios hasta que le dieron la tesorería estatal, miles de millones de pesos perdidos y nadie que lo finque responsabilidad.
 Con la experiencia a cuestas de haber saqueado las arcas de la universidad, López Miranda hace y deshace en la tesorería municipal, proveedores sin cobrar desde hace más de año y medio, y, sobre todo, el maneo discrecional de las participaciones de decenas de ayuntamientos.
Alcaldes que anuncian la creación de un frente único para exigir que el desgobierno del Jarrita les entregue los recursos que por Ley les corresponden y no han recibido, lo cual implica ya un delito así como una falta administrativa.
El Ratón Miguelito cuenta con cómplices y comparsas, como el tal Antonio Ferreyra Piñón, dizque dirigente del sindicato de empleados del Poder Ejecutivo, quien no ata ni ladra con el manejo del fondo de pensiones que afecta desde hace años a cientos de trabajadores de base.
Como en el caso del Poder Judicial, la Auditoría Superior de Michoacán, voltea la jeta y finge demencia y estúpida calma, cuando hay ya procedimientos en contra del Ratón Miguelito López Miranda y su patrón el calenturiento Jarrita.
Para esto, el goberladrón electo, Silviano Aujreoles aseguró, sin que nadie le preguntara, por cierto, que su gobierno tendría cero tolerancia contra la corrupción, entonces, debemos esperar que llegarán a hacerle las cuentas al Jarrita, pues al paso que van no le van a dejar ni una caja de clips.
Y ya que se habla de creatividad, esas lacras que se cuelgan del dolor ajeno y el escándalo para obtener ganancias políticas, luego de abandonar la causa jurídica del moribundo doctor Mireles, ahora se dan el lujo de gastar nuestro dinero para pasear y exhibirse con el cura Solalinde, ducho defensor de migrantes centroamericanos.
Están viendo que la violencia, robos del fuero común y de alto impacto, que el cobro de piso, extorsión y secuestro es cada día más recurrente en todo Michoacán, que urge recobrar el estado de derecho y salen con sus estupideces snobistas, lo bueno es que ni la hermana alcanzó hueso, bendito dios.
Por cierto, durante la ocupación toluqueña que encabezó el virrey Alfredo Castillo Cervantes, se persiguió a los grupos criminales locales y foráneos, tanto, que no obstante su alto poder económico estos últimos desaparecieron de medios, puentes y plazas públicas.
Ahora, ni una semana pasó que al Silviano le entregaron carta de mayoría, resurgen en los medios masivos de comunicación, emiten sendos comunicados, amenazan y proclaman su hegemonía en la entidad, entonces, ¿casualidad o simplemente pactos comerciales?
Con la salida del procurador Godoy se tira por la borda todo un trabajo de seguimiento y escrupulosa limpia de la policía ministerial en Michoacán, pues el abogado se dedicó a hacer su trabajo y nuevamente la maquinaría judicial se activó y volvió a trabajar.
Durante los desgobiernos de Lázaro y El Chino Godoy, según nos cuentan los analistas locales y nacionales, la estructura de la procuraduría y seguridad pública fueron un apéndice más de grupos criminales, tanto así dejaron de cumplir su trabajo institucional que el Poder Judicial cerró varios juzgados penales en algunos distritos judiciales.
Luego de purgar la institución, sacaron todos los expedientes pendientes y comenzaron a cumplimentar órdenes de aprehensión, capturando a decenas de delincuentes que gozaban en libertad de completa impunidad, entonces, comenzó a trabajar otra vez el sistema judicial, este trompo necesita una uña muy fuerte y ancha, a ver si con tanta promesa ramplona no regresan a lo mismo.
Quien debe de conectar la boca con la memoria y sentido común es la senadora panista Luisa María Caderón Hinojosa, quien luego de haber probado por segunda ocasión consecutiva la negativa de los michoacanos, despotrica y sentencia con cierto aire de amargura y venganza.
Una vez más es para que se entere La Cocoa, de que ella y sus hermanos no son bien vistos ni aceptados por la gente en Michoacán que si gusta probarse en las urnas por acá siempre va a perder, más cuando se documenta y comprueba que vendió las elecciones municipales en Zamora, La Piedad y Morelia, traicionando a sus candidatos y al partido mismo.
Fuentes al interior del PAN michoacano aseguran que la dirigencia nacional tiene todo un expediente en el que demuestran que Cocoa actuó en contra de los tres candidatos de esos municipios, pero no la van a expulsar ni harán público el asunto, pues así lo dispuso el que será su jefe nacional: Ricardo Anaya.

Lástima, pues se le consideraba una buena mujer, y lástima también pues los partidos políticos que se manejan con dinero público, esto es, con nuestro dinero, obran de manera discrecional y no cumplen ni hacen cumplir reglamentos ni leyes, si ella infringió o violentó cualquier norma, debe recibir la sanción correspondiente. ¿O qué la hace tan especial?

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