Una de Vaqueros. . .
Arturo García Gaytán.
en twitter: @arturo_ggaytan
en facebook: Arturo García Gaytán
Alsonso:
Te dieron un voto de confianza,
no un cheque en blanco…
Por si no fuera
suficiente mantener una clase política rapaz y corrupta los mexicanos debemos
apañarnos a las disposiciones de la madre naturaleza y, de ser posible,
sobrevivir en términos y condiciones poco recomendables. El pasado 19 de
Septiembre recibimos una lección de vida bastante enriquecedora y cruel. Un sismo sacudió la capital del país
enlutando familias, destruyendo hogares y dejando cientos de muertos y
damnificados, una vez más, la población civil, Juan Pueblo, superó y rebasó a
las autoridades, volcándose a las calles a realizar rescates aun exponiendo su
propia vida.
A diferencia
del sismo del 85, la internet y las redes sociales fueron el catalizador de
ayuda e información una vez que la red de telefonía celular colapsó dejando
incomunicados a millones de capitalinos, entonces, el mexicano más rico del
mundo decretó la liberación de su red wi-fi poniendo remedio.
En televisión o
youtube no se puede dimensionar el tamaño de una tragedia de esta magnitud, tal
vez por eso algunos analistas chabacanos se atreven a decir que es una cortina
de humo para las raterías de Peña Nieto y pandilla, bueno, a la vejes,
viruelas.
Desgraciadamente
en nuestro amado México tenemos la peculiaridad de sacar lo peor de nosotros
mismos como personas y como comuna en medio de las crisis, sobre todo la clase política
y gobernante son de los que lucen sus peores galas en esta materia.
Por ejemplo, la diputación
local acordó “donar”, 12 mil 500 pesos por diputado, para reunir medio millón
de pesos en total, vamos, hubo algunos de ellos que gastaron más que eso tapizando
Morelia con anuncios espectaculares con su imagen, o los que acarrearon gente e
invitaron las carnitas en su informe legislativo.
Y todavía se ufanan de
ponerlo en su muro de Facebook, como el lerdo de Juan Manuel Figueroa Ceja, que
al ser cuestionado sobre la importancia de no caer en el fariseísmo y hacer
caridad sin ostentarlo, se faja al brinco y reniega de su catolisismo
trasnochado, conocemos su trayectoria política y sabes la clase de advenedizo
que es, no sorprende.
Luego, la funcionaria de
gobierno estatal que satura de imágenes de su pequeña hija arrimando insumos
para menores argumentando el buen corazón de la criatura y su espíritu
humanista, por dios, de verdad estamos jodidos por cualquier lado que lo
veamos.
Esta vez los memes brillaron
por su ausencia, concentrando el esfuerzo en la red sobre el manejo de ayuda,
centros de acopio, enseres necesarios y flujo de grupos de voluntarios. El
manejo fue ejemplar, salvo algunos borregos que intentaron desorientar al
personal.
La UNAM, una vez más
ejemplar, en cuanto a la disposición de sus instalaciones, escuelas y
facultades para aliviar la carga y facilitar la ayuda, desde el transporte de
chavos a los sitios siniestrados hasta la facilidad de dar atención a mascotas.
Por su raza habló el espíritu.
Un amigo panista de cepa
soltó en su muro de Facebook que las agresiones y cuestionamiento hacia la
clase política era orientado, que había mentes perversas detrás de todo ello,
la verdad es que no se ocupa ser conspiranoico ni militante de un partido, ya
estamos hasta la madre de mantener vagos.
Priva a lo largo y ancho
del país un hartazgo hacia todo aquello que huela a política y a político, llámese
diputado local, federal, senador, gobernador o presidente de la república, a
pulso se han ganado no solo el desprestigio de quienes alguna vez confiamos y
les dimos el voto, hoy, enfrentan el rechazo.
La actitud filantrópica y
benevolente del Clavillazo Ochoa Reza, dirigente nacional del PRI contrasta con
los miles de millones de pesos que gobernadores de su partido han robado y
saqueado de las arcas del erario, para venir a DONAR amablemente, que se sepa,
se llama reembolso, pero nos seguimos tragando la píldora de que son muy buena
gente los politiquitos.
Por cierto, comparemos los
contrastes: sale una tal andrea villanueva cano a llorar en los medios locales
que la procuración de justicia es un asco, que la corrupción campea y urge
meterle mano para salvar al estado, luego nos enteramos que ella no se presentó
en la reunión de comisión de gobernación y Puntos Constitucionales para
dictaminar sobre el juicio político del alcalde de Maravatio.
Pero debemos entender que
ella es mujer, es panista y merece respeto, cuando con su omisión y actitud de
ME VALE MADRES, sepulta sus aspiraciones y desvelos, entonces, ¿merece el
repudio que enfrenta en redes sociales la clase política? De inundar con bolsas
con su foto el mercadito de los domingos en la calzada del panteón mejor luego
hablamos.
Leí un recorte de
periódico que un sesudo “analista y editorialista” se mofa y burla
tranquilamente de las aspiraciones políticas de Gabriel Prado Fernández, quien
basado en su trabajo espera catalizar alguna posición en la contienda que
recién comienza. A Prado no lo han desenmascarado a nivel nacional en llamada
telefónica filtrada, que se sepa, entonces la broma es en sentido contrario.
Mal y de malas, alsonso martínez
además de tener patas pa´rriba a la capital de Michoacán, se escapa a Europa
dejando tirada la chamba, ni sus cercanos colaboradores atinan con el paradero
de su patrón, así, imposible que el ojitos de gargajo aspire a la reelección.
Gran revuelo pretendió levantar
un líbelo publicado en un diario de mediana circulación estatal, según el “reportero”
luego de acuiciosa investigación “descubrió” que en el Poder Judicial de
Michoacán hay familiares trabajando y cobrando en nómina. Vaya, propongo al
sujeto y su medio al Pullitzer.
Si de verdad desean saber
la magnitud de la corrupción que impera impunemente en la administración
pública en Michoacán, será cosa que estén dispuestos a integrar el árbol
genealógico no sólo de políticos y empresarios, también de periodistas.
Simplemente en el Poder
Legislativo, ojalá fueran tan decentes de meter en nómina a sus familiares,
pero no, van detalles, quelites y novias; y donde cobra uno, cobran cuatro o
cinco, pues los becarios meten a uno que de su sueldo le paga o otros más.
¿Somos o nos hacemos?
